¿Conocéis a María de Zayas? La verdad es que no es una mujer del siglo XXI, pero es muy interesante saber un poquito más sobre ella. ¿Me acompañáis a hacer un recorrido por su vida y obra? ¡Recuerda pinchar sobre la estrellita para indicar que te ha gustado esta entrada! Te lo agradezco mucho.
Nivel de español: B2
Doña María de Zayas y Sotomayor no tiene una biografía muy conocida. A decir verdad, conocer su vida sí sería de utilidad a la hora de estudiar su obra. Sus narraciones, por otra parte, presentan tintes autobiográficos, especialmente aquellos contenidos que versan sobre temas intelectuales y sobre su visión de la sociedad y de las relaciones sentimentales. Entonces, ¿qué sabemos sobre la vida de María de Zayas? Nació el 12 de septiembre de 1590 en Madrid. Esto se sabe gracias a la partida de nacimiento que estudió Serrano y Sanz. Asimismo, su padre era Fernando de Çayas (Zayas), capitán de Infantería y que fue nombrado en 1628 Caballero del Hábito de Santiago por sus servicios a la Corona. Su madre era doña María de Barasa. También se ha señalado quiénes fueron sus padrinos (Diego de Santoyo y Juana de Cardona) y los testigos (Bernabé González y Alonso García). Fue bautizada en la parroquia de san Sebastián (Madrid).
La familia de María de Zayas tenía una cercana relación con la del Conde de Lemos. Precisamente (siguiendo a Amezúa, citado por Montesa), don Fernando de Çayas pudo estar al servicio del conde de Lemos. Y esta buena relación entre ambas familias también aparece en la obra de Zayas.
La afición por la escritura se despierta de María de Zayas en torno a los 25. Primeramente, se inicia con la poesía y participó en algunos concursos y certámenes de la época. Esto le permitió, por otra parte, ser conocida en los ambientes del Madrid del siglo XVII.
De Zayas entabló amistad con Pérez de Montalbán y con Alonso del Castillo Solórzano. De hecho, ambos le dedican algún elogio en sus obras. En 1639 Zayas recuerda a Pérez de Montalbán en el romance Lágrimas panegíricas a la temprana muerte del gran poeta Pérez de Montalbán. Y este, Pérez de Montalbán, fue quien la puso en contacto con Lope de Vega. Además, la influencia de Lope de Vega sí está presente en las obras de Zayas. Por su parte Lope de Vega dedica una alabanza a María de Zayas en el Laurel de Apolo. También Zayas mantuvo una estrecha amistad con la poetisa Ana Caro.
Para terminar esta entrada (la cual tendrá una continuación y conclusión la próxima semana), Zayas no se mantuvo oculta. Ella entregaba sus obras a otros escritores para que las leyesen y, más tarde, estas eran llevadas a imprenta para que fuesen publicadas. María de Zayas tenía claro que quería ser considerada como una escritora y así lo manifiesta:
Quién duda, digo otra vez, que habrá muchos que atribuyan a locura esta virtuosa osadía de sacar a luz mis borrones siendo mujer, que en opinión de algunos necios es lo mismo que una cosa incapaz. (…) las almas ni son hombres ni mujeres: ¿qué razón hay para que ellos sean sabios y presuman que nosotras no podemos serlo?
María de Zayas (mencionado por Solana, 2010)
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Letras en español – Belén Riesco©

REFERENCIAS
Montesa Peydro, S. (1979) : Texto y contexto en la narrativa de María de Zayas. Tesis doctoral. Mención honorífica en el Premio Nacional María Espinosa. Madrid (España): Gráficas Maravillas
Paun de García, S. (1988): “Traición en la amistad de María de Zayas”en Anales de Literatura Española, núm. 6. España: Universidad de Alicante.
Schwartz, L. (1999): “Discursos dominantes y discursos dominados en los textos satíricos de María de Zayas” en La creatividad femenina en el mundo del barroco hispánico: María de Zayas, Isabel Rebeca Correa, Sor Juana Inés de la Cruz, vol. I, pp. 301-322
Senabre Sempere, R. (1963): “La fuente de una novela de doña María de Zayas” en Revista de Filología Española, vol. XLVI, nº ½
Solana Segura, C. (2010): “Las heroínas de las Novelas amorosas y ejemplares de María de Zayas frente al modelo femenino humanista” en Lemir 14, pp. 27-33